sábado, 27 de enero de 2018

Solo palabras

Las palabras tienen poder y la pasión, la tristeza, la rabia y la alegría de quién las maneja. ¿Quién pudo imaginar que "tener un sueño" incendiara los corazones de los oprimidos? Miles de preguntas que acabaron en SI y toda una vida por delante, muchas de ellas que se resolvieron con un NO y fueron predecesoras de toda una vida a su vez y de años de amor incondicional que nunca van a terminar... (sé que encontraste la forma de perdonarme).
El poder de un discurso cargado de valentía ante la atrocidad, que cambia el devenir de la historia y permite conmemorar el final del dolor, hoy, por ejemplo, tras setenta y tres inviernos. Una letra de amor que os recuerda que el perdón os hará libres.
 O este "come away with me in the night" que suena mientras acaricio estas letras sin sentido hasta que termina de cantar Norah. Peticiones al viento, súplicas al tiempo.
Conversaciones poderosas que sin entender bien porqué desbordan el Sena, un río enloquecido con solo susurrar nuestra posible presencia. La pasión con que están escritos los anhelos aunque solo sean eso... anhelos. Si nos lo proponemos podemos desbordar el Tíber, todo es cuestión de soñar.
Un "lo siento" sincero que devuelve la fe en la humanidad unos minutos y un "para siempre" que sea o no cierto reconforta toda una vida.
Y un nunca, nunca, nunca... un mantra que repito mientras contradigo a la cabeza y burlo al corazón. 

Si el Sena no anega toda la belleza y la luz, siempre, siempre, siempre, nos quedará París...



"Sueño a menudo el sueño sencillo y penetrante
de una mujer ignota que adoro y que me adora,
que, siendo igual, es siempre distinta a cada hora
y que las huellas sigue de mi existencia errante.

Se vuelve transparente mi corazón sangrante
para ella, que comprende lo que mi mente añora;
ella me enjuga el llanto del alma cuando llora
y lo perdona todo con su sonrisa amante.

¿Es morena ardorosa? ¿Frágil rubia? Lo ignoro.
¿Su nombre? Lo imagino por lo blando y sonoro,
el de virgen de aquellas que adorando murieron.

Como el de las estatuas es su mirar de suave
y tienen los acordes de su voz, lenta y grave,
un eco de las voces queridas que se fueron…".
PAUL VERLAINE


*Pintura de Maurice de Vlaminck, El Sena en Chatou, S XIX-XX.

No hay comentarios:

Publicar un comentario