Ha tentado a la suerte tanto que, como Julio César, no sabe de donde proviene la puñalada que se llevó su último aliento.
¿Fue el 13 apostado tantas veces, la sal a puñados derramada...?
Qué mala suerte sentir así.
Qué mala suerte no nacer enseñados a vivir
Qué mala suerte que la piedra la llevemos atada al pie de nacimiento, para tropezar una y mil veces más.
No hay espacio para más paraguas abiertos en la casa, ¿cómo podría hacérselo entender?
¿Cómo podría evitar la fría complacencia del reflejo en el espejo? un "te lo dije" que resuena en las paredes del mundo, que es como la losa que sostiene este paraguas abierto, que cada vez pesa más, más y más...
Et tu, Bruté?
¿Y tú O´hara? ¿Tú también O´hara?
Para alzar un peso tan grande
¡Tu coraje haría falta, Sísifo!
Aun empeñándose en la obra
El Arte es largo y breve el Tiempo.
Lejos de célebres túmulos
En un camposanto aislado
Mi corazón, tambor velado,
Va redoblando marchas fúnebres.
-Mucha gema duerme oculta
En las tinieblas y el olvido,
Ajena a picos ya sondas.
-Mucha flor con pesar exhala
Como un secreto su grato aroma
En las profundas soledades
CHARLES BAUDELAIRE
* Pintura de Max Ernst, "La pubertad cercana a las Pléyades"
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