Hay pocas cosas que puedan ya hacerme sufrir, porque hay pocas cosas en la vida que sean más dolorosas que vivir. 22 años no es tarea suficiente para sorprenderse y es demasiado para no llorar. Malas noticias, de esas noticias que te amargan el corazón y te nublan la mente, noticias que aguardan en el lugar más recóndito y desagradable de este mundo y que empujadas por un pequeño soplido de malicia llegan hasta aquí, hasta mis pies y me inquietan, me turban, me levantan y me obligan a caer...
Hoy como ayer, es de esos días de: pensé que solo era cosa del vecino de enfrente, o de los "famosos" de la caja tonta... ERROR!
Error porque la vida es cosa de todos, muy a nuestro pesar.
Mientras tanto, espero, espero y me calmo, sosiego mi corazón y miro alrededor, NADA, o eso parece, porque el vecino calla, y todos los problemas del mundo están esperándote única y "egocentricamente" a tí.
Aquí estoy para ti, sin horarios ni calendarios, ya lo sabes :)
ResponderEliminarLo sé mi pequeña mariposa :)
ResponderEliminar