sábado, 30 de abril de 2016

Ilusos ilusionados

He arrancado las hojas del libro que nunca acabaré y en las quedaban en blanco he escrito un nuevo capítulo. No tiene fecha, hora, no tiene caducidad ni anotaciones al margen, no hay advertencia ni recomendación, únicamente empieza así:


"Y sé que dependemos del poder de la ilusión"

¿A caso eso no es suficiente? ¿no es la ilusión el mecanismo más potente para sobrevivir?
¿No es la ilusión una fuerza invisible y mágica que, a veces, consigue que todo recobre el sentido?

Es gratificante conocer el secreto para tenerlo todo. Solo hay que querer... así, noto el calor que anhelo, cuando quiero. Puedo reducir los días a minutos con el único coste de tragarme la arena del reloj.
Sonrío a la hora más intempestiva, me velo la ilusión para que no pierda intensidad con los sueños.
Cuido de no caer en la desidia de no quererlo todo y en un descuento de horas amontonadas, ganas sobre ganas, vuelvo a sonreír.

Bofetadas de templada ilusión si, pero  mientras mañana siempre será mañana.

Qué ilusos, qué ilusionados...


"
   "Porque te tengo y no
Porque te pienso
Porque la noche está de ojos abiertos
Porque la noche pasa y digo amor
Porque has venido a recoger tu imagen
Y eres mejor que todas tus imágenes
Porque eres linda desde el pie hasta el alma
Porque eres buena desde el alma a mí
Porque te escondes dulce en el orgullo
Pequeña y dulce
Corazón coraza

Porque eres mía
Porque no eres mía
Porque te miro y muero
Y peor que muero
Si no te miro amor
Si no te miro

Porque tú siempre existes dondequiera
Pero existes mejor donde te quiero
Porque tu boca es sangre
Y tienes frío
Tengo que amarte amor
Tengo que amarte
Aunque esta herida duela como dos
Aunque te busque y no te encuentre
Y aunque
La noche pase y yo te tenga
Y no."
MARIO BENEDETTI



* Pintura de Max Ernst, "woman, old man and flower", 1923.

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